Enseñando el lugar

-me alegra que lo admitas- susurro y me paro con dificultad -mañana sera lo mismo- susurro caminando lentamente hacia la puerta, mi mirada era un poco bisarra -falta una hora y media para que empiese la noche... estate preparado- susurro apoyandome en la puerta, respirando agitadamente

no. no voy a volver a tomar de tu sangre asique olvidalo y sera mejor que descanses

-eso es lo que tu crez- digo con una leve sonrisa -una vez que lo has echo,..tu no..- caigo de rodillas, mas me agarro de la perilla para pararme de nuevo -aun asi.. me meresco mi castigo, desobedeci a un sensei- susurro

bien tu castigo sera quedarte en tu habitacion descansando

/dije levantandome/

-que grato castigo, pero lo desobedecere- digo abriendo la puerta y doy un paso hacia afuera de la habitacion -quitate todo rastro de sangre de tu rostro- susurro

hai

/dije llendo al baño/


demo ya te dije que no volvere a tomar sangre me asquea

-eso sera malo en tu futuro- digo viendo la nada -un vampiro con buena sangre,. no deveria pasar por esas complicaciones humanas- digo y me dirijo hacia las escaleras

que sabras tu de mi vida y de mi sangre


/dije mirandolo con mi mirada fria/

me detengo ante sus palabras -baka, aun asi, puedes vivir en tu forma humana, con ellos, eso no importa- digo como si nada- es tu vida....-

por ello mismo no deberias haberte entrometido

/dije saliendo de aquella habitacion para subir a la zona de clases diurnas/

-me da igual, sensei- digo encojiendome de hombros y tambien subo, aun faltaba una clase y los alumnos se irian asi que podria pasear con mi ropa manchada un rato -tengo hambre- susurro y veo hacia los lados

no puedes subir hasta dentro de una hora


/dije bloqueandole el paso/

es una orden de tu sensei

-una orden- susurro -orden denegada, sensei, tu estas alimentado, yo no, asi que, si me perdonas- digo pasandote con un agil movimiento y me alejo de ti a paso un poco rapido, necesitaba saciar un poco mi hambre

te recuerdo que se te tiene prohibido tomar la sangre de los alumnos


/dije saliendo y dirigiendome hacia el aula de musica/

-Me da igual,.. un humano solo es un humano, se reproducen como conejos, casi nadie se da cuenta de que desaparecen,.. mientra que con los vampiros, casi no hay- digo mientras me perdia entre las sombras - la responsabilidad cairia en ti- susurro

maldita sea


/dije llendo a la clase de musica pues empezaba en diez minutos/

-los gritos se escucharan.. o... tal vez no... y solo se escucharan los lamentos de los demas- susuro, mientras mis ojos se volvian rojos -la cazeria empiesa- susurro caminando con tranquilidad

/suspire y me puse delante de nagasu/


si tengo que suspender la clase para proteger a mis alumnos y detenerte lo hare


/dije mientras mi mirada cambiaba de mi habitual color rojo a uno rojo escarlata/

-hermosos ojos, sensei- digo como si nada y te paso, caminando como si nada, bajo la mirada un poco -tu vete a tu clase- susurro sin detenerme

/ya enfadado pues no iba a permitir que nadie tocase a mis alumnos invoque un unicornio/


quieres jugar juguemos

Centia la precencia del animal mitologico de los humanos -akuma...- susurro, ya estaba arto de que se interpusiera, aria lo que no habia echo en michos años, irce de fuga, suspiro resignado -sayonara- susurro y con gran aguilidad me dirijo a una pierta de salida de emergencia, tenia casi en mis talones al animal ese

-akuma..baka, isite a unos de tus hijos un testarudo- susurro y me alejo de ahi lo mas rapido posible

kai no puedo creer que no puedas con un simple vampiro



/dije subido encima del lomo del animal/

me subo a un arbol con suma agilidad, bostezo un poco, estaba agotado, me faltaba sangre y sobre todo, ahora un sensei enojado me perseguiria -genial- susurro acomodandome en la rama

/al ver que se subia a un arbol hize desaparecer al unicornio y invoque a un pegaso subiendo asi donde estaba/


no creas que vas a esacpar tan facilmente

Bostezo un poco -dejeme empas, sensei, existen mas alumnos, no se muera por uno- digo tranquilamente, viendo la luna, eso y el sello eran los que me almaban un poco